Hooters cierra abruptamente 30 locales

La icónica cadena estadounidense Hooters ha cerrado abruptamente más de 30 locales en distintos estados del país, según confirmó un vocero de la marca a USA TODAY. La empresa calificó la decisión como “difícil”, pero parte de una reestructuración que apunta a operar únicamente bajo un modelo de franquicias.

Este anuncio refuerza una realidad que venimos analizando desde JLP GLOBAL: las grandes cadenas tradicionales están perdiendo terreno en un nuevo ecosistema gastronómico donde la eficiencia, la innovación y la conexión real con el consumidor son claves.

¿Qué está pasando con Hooters?

Aunque la marca no ha publicado la lista completa de locales cerrados ni ha respondido sobre cómo fue notificado el personal, se han confirmado cierres en ciudades como Orlando, Atlanta, Detroit, Houston, Nashville, Rockford, Charlotte, Memphis y más. La mayoría de los establecimientos afectados eran de propiedad directa de la compañía, no franquiciados.

En marzo de este año, Hooters ya había presentado una solicitud de bancarrota, aunque en su momento no se anunció el cierre de locales. Ahora, con más de 150 sucursales propias bajo revisión, la empresa parece estar abandonando su modelo corporativo para enfocarse exclusivamente en franquicias.

¿Una tendencia más profunda?

Este no es un caso aislado. En los últimos meses, hemos visto movimientos similares por parte de otras grandes cadenas en EE.UU.:

• Red Lobster presentó bancarrota y cerró más de 90 locales.
• TGI Friday’s anunció el cierre de varias sucursales y la venta de operaciones internacionales.
• KFC enfrenta caída en ventas en su país de origen.
• Hooters, que alguna vez fue símbolo de la cultura pop americana de los 90, pierde relevancia frente a nuevos formatos más ágiles y modernos.

La señal para los emprendedores gastronómicos

Desde JLP GLOBAL lo leemos así: el consumidor actual ya no se siente atraído por las fórmulas del pasado. Busca autenticidad, conveniencia, buen producto, conexión digital y valores claros. Las marcas que no se adaptan a esa demanda —por más nostálgicas que sean— simplemente quedan fuera del juego.

Las cadenas tradicionales están pagando el precio de no haberse reinventado a tiempo.

Por eso, si eres emprendedor gastronómico, franquiciante o estás construyendo una marca, presta atención a estas señales. La transformación del foodservice no es opcional: es urgente y global.